La comisión interdepartamental del Consell sobre el Covid se reúne mañana para decidir si se da un paso más en la desescalada y se suavizan las restricciones, ante lo cual la Coordinadora Empresarial del Ocio y la Hostelería de la Comunitat Valenciana se encargó de reclamar ayer que se amplíe el horario de cierre de bares y restaurantes, actualmente a las 18 horas, hasta el inicio del toque de queda.

La petición llega tras una encuesta sobre la Semana Santa en la hostelería, campaña que califican de «catastrófica», pues el confinamiento perimetral «y la práctica prohibición de la actividad turística han provocado un retroceso del 72% en la actividad económica de las pymes de la hostelería y el ocio con respecto a la última Semana Santa precovid». Un 66,4% de los encuestados consideran que estas fiestas han sido bastante o mucho peor de lo esperado.

Con respecto a las principales reclamaciones del sector para la revisión de la desescalada, un 87,8% de los hosteleros reclaman que se amplíen sus horarios hasta el toque de queda, el 72,36% considera necesario recuperar un 50% del aforo en el interior de los locales y uno de cada tres establecimientos propone la utilización de purificadores y medidores de CO2 para garantizar la seguridad de los espacios cerrados en el sector.

Recuerdan que muchos ayuntamientos no han canalizado los trámites para pagar el dinero del Plan Paréntesis «y que las ayudas específicas para el ocio nocturno, el más perjudicado, aún no se han cobrado».

Sobre la reunión de mañana, la vicepresidenta Oltra dijo que se tendrá en cuenta el aumento de contagios en España y en Europa, que la Comunitat es la autonomía con menos casos nuevos y que se inicia la vacunación «a velocidad de crucero». Pero no se pronunció más allá de reclamar prudencia y de debatir la propuesta que traslade Sanidad.